El mercado de divisas (Foreign Exchange en inglés, conocido también como Forex o simplemente FX), es una de las más emocionantes y rápidos mercados en todo el mundo. Hasta hace poco, el comercio de divisas ha sido de dominio de las grandes instituciones financieras, corporaciones, bancos centrales, fondos de cobertura y de personas extremadamente ricas. La aparición de Internet ha cambiado todo esto y ahora es posible que los inversores promedio comprar y vender divisas con facilidad con el clic de un mouse a través de brokers en línea.
Las fluctuaciones monetarias diarias suelen ser muy pequeñas. La mayoría de los pares de divisas se mueven menos de un centavo al día lo que representa un cambio de menos de 1% en el valor de la moneda. Esto hace que las divisas sea uno de los mercados menos volátiles del mundo. Es por eso que muchos especuladores de divisas se basan en la disponibilidad de un gran apalancamiento para incrementar el valor de los movimientos potenciales. En el mercado de divisas al por menor el apalancamiento puede ser de hasta 250:1. Mayor apalancamiento puede ser muy arriesgado, pero debido a las transacciones super rápidas y con mucha liquidez los corredores de divisas han sido capaces de hacer del alto apalancamiento un estándar en la industria con el fin de hacer que los movimientos sean significativos para los operadores de divisas.
El mercado de divisas ofrece muchas oportunidades para los inversores. Sin embargo, con el fin de tener éxito, un operador de monedas tiene que entender los conceptos básicos detrás de los movimientos de divisas.

¿Qué es Forex?
El mercado de divisas es “el lugar” donde las monedas se negocian. Las divisas son importantes para las mayorías de personas en todo el mundo, lo sepan o no porque las monedas deben ser intercambiadas con el fin de llevar a cabo el comercio exterior y los negocios. Si usted vive en EEUU y quiere comprar queso de Francia, ya seas tú o la empresa a la que le compras tiene que pagarle a los franceses en Euros por el queso. Esto significa que el importador de EEUU tendría que cambiar el valor equivalente en dólares a euros. Lo mismo ocurre cuando viajas. Un turista francés en Egipto no puede pagar con euros para ver las pirámides porque no es la moneda acepetada localmente. Como tal, el turista tiene que cambiar los euros a la moneda local, en este caso la libra egipcia, al tipo de cambio actual.
La necesidad de cambiar monedas es la razón principal por la cual el mercado de divisas o Forex es el mercado financiero más grande y más líquido del mundo. Empequeñece otros mercados en tamaño, incluso el mercado de valores, con un valor promedio de negociación de alrededor de US$ 2 billones de dólares al día.
Un aspecto único de este mercado internacional es que no hay un mercado central de divisas. Por el contrario, el comercio de divisas se realiza electrónicamente “over-the-counter” u “OTC”, que significa que todas las transacciones se realizan a través de las redes informáticas entre los comerciantes de todo el mundo. El mercado está abierto las 24 horas del día, cinco días y medio a la semana y las monedas se negocian en todo el mundo en los principales centros financieros de Londres, Nueva York, Tokio, Zurich, Frankfurt, Hong Kong, Singapur, París y Sidney a través de casi todas las zonas horarias. Esto significa que cuando el día de negociación en los EEUU termina, el mercado forex inicia nuevamente en Tokio y Hong Kong. Cómo tal, el mercado de divisas puede ser muy activo en cualquier momento del día con las cotizaciones de precios en constante cambio.
¿Vale la pena invertir en Forex?
El mercado forex puede ser muy rentable debido a su poder de apalancamiento, pero es necesario conocer el mercado y aprender algo de análisis fundamental y técnico. La mayoría de brokers cuentan con el entrenamiento necesario para que puedas empezar a realizar tus transacciones y hasta te brindan una plataforma “demo” donde puedes practicar con dinero ficticio, hasta que sientas que ya tienes la habilidad para invertir con dinero real.
Vía: Investopedia