Nunca se es demasiado joven para aprender algunas lecciones básicas de administración de dinero que te ayudarán en convertirte en un adulto financieramente responsable. La mayoría de los colegios no enseñan absolutamente nada a nuestros hijos sobre asuntos financieros, por lo que es nuestra responsabilidad enseñarles todo lo que se pueda del tema. Si deseas ayudar a tus hijos a convertirse en adultos frugales, comienza con estas siete lecciones que tus hijos deben aprender sobre el dinero:
El dinero se gana
En la economía de hoy en día, criar a tus hijos a que esperen que las cosas se les entregarán sin ningún esfuerzo los pondrían en una severa desventaja en el mundo laboral. No quiere decir que hay que pagarles para hacer las tareas del hogar que deberían estar haciendo ya sin esperar ninguna recompensa financiera (porque, ¿quién no quiere vivir en un lugar libre de desorden?), pero si animarlos a que tengan por ejemplo, su negocio de venta de limonada, o preparar una venta de garaje cuando tengan la edad suficiente.
Querer vs. necesitar
Los niños necesitan entender que lo que necesitamos siempre viene antes de lo que queremos. Si quieren un nuevo juguete o un videojuego y el dinero es escaso, hay que explicarles que el dinero es un recurso limitado y cosas como la ropa y los alimentos son primero.
El poder de la paciencia
Establecer algunas reglas básicas: por cada 10 dólares que tu hijo gana, por lo menos 1 dólar debe ser ahorrado. Consiga 3 alcancías y etiquételas como “ahorro”, “gastos” y “donaciones”. No les obligue a ahorrar dinero para donarlo pero hay que explicarles que hay otros niños no tan afortunados como ellos y que donarles dinero sería algo muy agradable de hacer. Revisen la alcancía de ahorros una vez al mes y dejen que se maravillen ante el poder de la paciencia. Explicales que tú también tienes que ahorrar dinero como ellos para hacer cosas divertidas como salir de vacaciones y pregúntales ¿acaso no te alegras de que soy lo suficientemente inteligente como para ahorrar dinero?
Compre por el valor
Cuanto tu hijo tenga la edad suficiente para entender matemáticas básicas, llévalos contigo a hacer las compras y que participen en el proceso de negociación. Muéstrales dos artículos idénticos a precios diferentes y pregúntales cual les parece la mejor opción.
No se puede tener todo
Todo el mundo merece un derroche ocasional, pero no se puede negar el hecho de que comprar todo lo que queramos generaría un desastre financiero. Lleva a tu hijo a una tienda de juguetes, dale un billete de 20 dólares y permítele elegir lo que desee, siempre y cuando se ajuste a ese presupuesto.
Cosas antiguas = Nuevo dinero
Cuando a tu niño le quede grande su ropa y pierda interés en sus juguetes, planeen una venta de garaje o una visita a una tienda de segunda mano. Aprovechen esta oportunidad para deshacerse de las cosas que ya no necesita. Vendan todo lo que puedan y regalen el resto.
El dar se siente bien
En Navidad, participen en una obra de caridad. Pregúntale a tus hijos cuánto les encantan recibir regalos. Después de expresar lo maravilloso que se siente, explícales que otras familias no tienen el dinero suficiente para comprar cosas buenas para sus hijos. Escoja a un niño menos afortunado para comprarle un regalo e involucra a tus hijos en el proceso. Llévalos a la tiendan y vean que le puede gustar a un niño de su edad y dales un presupuesto fijo para gastar en regalos. Tu hijo estará mas agradecido por las bendiciones en su vida y con más probabilidad de convertirse en un adulto de caridad.
¿Qué le estás enseñando a tus hijos sobre el dinero? ¿Qué más agregarías a esta lista?
Traducido de: “7 lessons your kids should learn about money”
Vía: Lifehack.org